Cada botella de tequila #TantitaPena es hecha a mano, en una empresa familiar de la región de Jalisco, México.
Debido a que es un proceso que requiere gran destreza y tiempo en cada paso, Tantita Pena seleccionó a los mejores de la región, generando empleabilidad y cuidando de las tradiciones locales.
Para la elaboración de nuestras botellas se utiliza vidrio reciclado, fundido a 2000°F hasta obtener una textura viscosa necesaria. Para poder tomar la cantidad necesaria de vidrio fundido se utiliza un tubo de acero hueco o caña, calentado de un extremo y alejado del trabajador, esto con la finalidad de estar a la misma temperatura del vidrio y prevenir el choque térmico que podría dificultar el manejo del vidrio.
Posteriormente, este tubo se introduce en el depósito de vidrio derretido del horno y se le da vueltas sobre su propio eje para poder obtener la mayor cantidad de vidrio que se necesita para cada botella, después pasa a un molde de acero en grano y con aire caliente dentro de la pieza se da la forma deseada.
Una vez que sale del molde, pasa a un horno de temple para poder disminuir la temperatura poco a poco y de manera uniforme.
El proceso que debe pasar cada botella tarda al rededor de 2 días, es por eso que cada vez se recurre más a procesos industriales y se van dejando perder estas grandes tradiciones.
A continuación les dejamos un pequeño vídeo de parte del proceso de elaboración de las botellas de Tantita Pena.